Excalibur es el nombre de la espada del rey Arturo tanto en los textos franceses como Ingeses.
El origen de la palabra, surge de la deformación de Caledfoulch o Kaledfoulc'h. Hay quienes estiman que el sentido de esta palabra era "corte duro", pero debería considerarse que el segundo término, bulg o flug, es de raiz indoeuropea y dio origen al volcablo latino fulgur. Por lo tanto Caledfoulch podría traducirse como "duro fulgor" o "duro rayo", caso en el cual la denominación resulta aún más coherente con el concepto de espada mágica.
Excalibur puede comprarse con el gai bolga o el "arma secreta" de Cuchulainn y con Caladbolg la espada mágica de los Tuatha De Danann.
En la saga de leyendas artúricas, Excalibur es la espada de la Soberanía y del poder que se confía a Arturo. No es la espada en la piedra que el joven Arturo extrae cuando es buscado el sucesor de Uther Pndragon, sino otra espada, venida de Otro Mundo y entregada a Arturo por la Dama del Lago (Viviana). Luego de la batalla de Calmann, Arturo le solicita al caballero Girflet que arroje a Excalibur al fondo del lago. Al hacerlo sale del lago una mano que toma la espada y la blande por tres veces desapareciendo con ella: esto significa que Excalibur ha sido recuperada por la dama del lago.